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Por: Celina Abud
No es novedad que al comenzar la primavera aumenten las visitas a los nutricionistas, ya que con el calor se muestra más el cuerpo y en verano la gente quiere verse bien en traje de baño. Sin embargo, la tarea de estos profesionales excede la de confeccionar una dieta para bajar esos kilos rebeldes. Su orientación, especialmente a personas con patologías previas, puede salvar vidas. En el Día del Nutricionista, DocSalud.com dialogó con tres expertas que reflexionaron sobre el rol que desempeñan.
“La tarea principal de un especialista en nutrición es acompañar a quienes quieran llevar hábitos saludables, ya sean personas sanas que quieren aprender a comer, individuos con patologías previas que necesitan un nuevo plan alimentario, o la gente afectada por un ‘sobrepeso cultural´, que vive haciendo ‘dietas mágicas’ que atentan contra sus objetivos”, indicó la doctora Mónica Katz, médica especialista en nutrición.
Por su parte, la licenciada Romina Sayar indicó que la consultan “jóvenes que se mudan solos y quieren aprender a organizarse con las comidas, embarazadas y lactantes, además de deportistas que buscan planes que contemplen el gasto extra que realizan para rendir mejor”. Pero también personas con patologías, como obesidad, hipertensión, colesterol, triglicéridos, diabetes, afecciones renales y enfermedad celíaca, además de individuos con trastornos alimentarios.
Por su parte la licenciada Silvana Abud también citó que, contra lo que se cree, “también acuden al consultorio personas a las que le cuesta subir de peso y necesitan una dieta hipercalórica” o bien individos que sufren ciertas afecciones para las cuales la alimentación les hace aliviar los síntomas, entre ellos, el colon irritable.
Por qué es importante consultarlos
Para Katz, hoy una visita al nutricionista es fundamental porque “antes tenías un mercado pequeño de alimentos y la familia aseguraba una alimentación saludable, pero hoy existe una variedad de oferta de productos y de información que hacen que el consumidor se confunda”. Entre las fuentes de información, la médica cita “las guías de alimentación, que no siempre se entienden; los rotulados de los alimentos poco claros; las controversias en los medios de comunicación, en donde dice un día que el salmón es bueno y al día siguiente que es malo; la publicidad y las redes sociales, en donde cualquier bloguero, sin ser experto, habla sobre alimentación”. Ante ese escenario es el experto en nutrición el que puede aclarar dudas y el único idóneo para orientar sobre alimentación saludable.
Por su parte, Abud indicó que “con aprender a comer, se cubren las necesidades de una persona“que puede sentirse cansada por una carencia de vitaminas y pensar que la solución está en un suplemento o comprimido, cuando sólo debe comer mejor”.
Qué se sabe de la profesión
“Un nutricionista no es solamente la persona que hace una dieta, sino también la que acompaña a toda una familia que sube de peso, o a una pareja que está por tener un bebé”, ejemplificó Katz. Luego destacó que muchos desconocen que existen los médicos especialistas en nutrición, más allá de los licenciados, pero que los dos están agrupados en asociaciones como la Sociedad Argentina de Nutrición (SAN) y ambos pueden asesorar, con sus diferentes características profesionales.
Sayar, por su parte, opinó que existe un desconocimiento sobre todas las tareas que un nutricionista puede realizar. “Más allá del trabajo en consultorio, el nutricionista tiene otras funciones, como asesorar a empresas de alimentos o bien realizar auditorías de comedores, de colegios, de restaurantes. Tenemos una amplia gama de posibilidades, nuestra profesión es amplia y hermosa”, indicó.
Con todo, las tres expertas coinciden que el nutricionista no es quien te ayuda con una dieta de choque, sino el que ayuda y acompaña en el camino de ganar hábitos para una mejor salud, que puedan sostenerse en el tiempo.
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